¿Ha valido la pena todo ese gran esfuerzo? Esa
es una de las preguntas que ahora de forma casi diaria me tortura y me la hago
de forma lacerante. Tanto sacrificio para poder levantar dos cines que fueron
diferentes y tanta ilusión por tratar de ir haciendo una colección de cine día
a día... ¿para qué?
Para que ahora ni haya cines y la colección esté guardada de aquella manera. Me estoy machacando mucho con todo esto y lo peor
es que no lo puedo evitar. Pero sinceramente las dos cosas las hice con mucha
pasión y gran entrega .
Tanto la construcción de esas dos salas en el
casco antiguo, ante el escepticismo de muchos como las exposiciones,
dos, con parte de la colección de cine. Quién me lo iba a decir a mí
algún día. Tener dos cines y exhibir mi colección. Lo mismo que años después me
encontraría sin cines y sin colección. ¿Qué había fallado? Quizás yo sea el
verdadero culpable de todo ello.
No voy a analizar el final de los Astoria por mi parte porque me hace daño, mucho daño, y me hice daño. Lo dejo para mi libro de memorias o así. Sí quiero hablar de aquella primera exposición de La Lonja con un poquito del material de lo que era mi colección de cine.
No voy a analizar el final de los Astoria por mi parte porque me hace daño, mucho daño, y me hice daño. Lo dejo para mi libro de memorias o así. Sí quiero hablar de aquella primera exposición de La Lonja con un poquito del material de lo que era mi colección de cine.