BOQUERON EN ESCABECHE

Estaba claro que el plato condimentado, más tarde o temprano, se iba a atragantar.Y así ha sido.Una afición que hace meses soñaba no solo con el equipo de sus amores, sino con nuevos proyectos, ilusiones (hasta Europa...) y el ¡por fin estar en Primera !.

Pero aquel Hércules que ascendió a los cielos "Boquerón" hizo una muy irregular campaña,salvo la "hombrada" en Camp Nou.Cada semana el equipo iba descendiendo hasta quedarse en el último de la tabla,y lo peor con una goleada del Osasuna en su propio campo,haciendo el mayor de los ridículos.

Pero la afición ya pedía la cabeza del entrenador. En su última rueda de prensa, decía que él no iba a presentar la dimisión. Estas cosas se suelen resolver cambiando de entrenador.No sé si es lo mejor pero suele ser así por aquello de cambiar psicológicamente a los jugadores.

No voy a culpar de todos los males al entrenador saliente.Si es verdad que ha estado muy al margen de ciertos comportamientos de sus jugadores.No me ha gustado la actitud de la directiva.

Callada, en silencio. Como que aquí no pasa nada.Tan sólo aquello de... "las palabras se las lleva el viento".

Ante el triste espectáculo en el Rico Pérez, por fin, movió ficha.La situación, insostenible.Y la afición, ni cuento. Pero hay más ingredientes en este cocinado.

Sí , y es el director técnico o como se le quiera llamar.¿Qué ha hecho? ¿Qué hace? Nada. Fichajes de aquí y allá,sin orden ni control. sin patearse campos y escoger gente joven,ilusionada de jugar en Primera y formar un conjunto compacto.Y de los jugadores,pues de todo ha habido.


Lesiones mil, escapadas dos mil, "bon vivant" y sobre todo excesiva permisividad por parte de la cúpula y el míster.Quizás faltó el látigo de Indiana Jones.

Después del repaso del Osasuna, la comida se ha indigestado. Boquerón en escabeche con una botella..."Boquerón" nos deja un Hércules "farolillo rojo",prácticamente en el infierno de Segunda, y él marcha con una cuenta no precisamente en números rojos.

 

El repaso se lo dieron "los rojillos". Los del palco, no saben, no hablan, hasta ni salen en la foto.¿Para qué? Es tiempo de elecciones.

 

Ahora se está en busca del entrenador perdido. Menudo marronazo. Nueve semanas de Liga y en descenso para hacer el milagrito de turno...El próximo 3 de abril en Donosti con la Real,la segunda gran final.

 

Paco Huesca