31 de octubre de 2011

Liderazgo a los 65 en Campello

Creatividad, liderazgo, trabajo en equipo, motivación…, todos estos conceptos tan en boga a nivel empresarial, como personal, tienen cabida en diferentes escenarios.

En el Teatro Auditorio Pedro Vaello en Campello, tuvo lugar un menú especial. Los ingredientes tenían un sabor, y un cierto color a positivismo. Los “mayores” del pueblo, actores, cantantes y bailarines, nos dieron una lección a los presentes.

El alcalde no quiso mencionar la palabra “crisis”,  pero hizo alusión a “los tiempos que corren” en un tono resignado. Entonces se giró hacia el escenario. “Ellos tendrían muchas cosas que contar y aportar”. Y lo hicieron, pero de qué manera.

Su entusiasmo, profesionalidad y sentido de humor, invitaba a la reflexión.
¿Son nuestros mayores más fuertes que nosotros? ¿Podrían ofrecer charlas y ponencias sobre liderazgo, motivación y cómo moverse en un escenario? Rotundamente sí.
Tras tres horas de música, bailes e interpretaciones gloriosas, Roberto y yo salimos respirando valores. Estoy segura de que si nos hubieran hecho un análisis de endorfinas a la entrada;  al salir, hubiéramos dado positivo.

Tras tres horas de música, bailes e interpretaciones gloriosas ; salimos respirando valores. Estoy segura de que si nos hubieran hecho un análisis de endorfinas a la entrada;  al salir, hubiéramos dado positivo.


¡Cuánto nos queda por aprender! No podemos hablar de la escucha activa, si no escuchamos, no podemos hablar de liderazgo si no reconocemos a uno, en este caso a  una líder, si no nos movemos por otros círculos distintos a lo conocido.

La naturalidad cotiza a la baja, y allí además de talento,  ésta se palpaba. La necesitamos para comunicar eficazmente.

Estas personas ¿mayores?  demostraron que tras una férrea disciplina, uno puede conseguir su objetivo: por ejemplo, subir a un escenario e interpretar a un personaje entonando, proyectando la voz y realizando las pausas oportunas. Además de meterte en el bolsillo a todo un auditorio. Cautivar.

Ahí va mi aplauso para todos ellos. En especial, a la líder a la que hacían alusión: una señora, que llevó prácticamente el peso de la obra, con un carisma, una gracia y un saber estar, que nos dejó con la boca abierta.

Aprendí muchas cosas y sentí otras tantas, en esa tarde noche sentada en el patio de butacas. Me contagiaron su optimismo estos mayores-jóvenes emprendedores de una nueva vida.

Joana Sánchez

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya marcha tienen por Campello

Cecilia dijo...

Soy de Campello,
estuve en el teatro
la gente que se sube al escenario
tiene un mérito grande.
Nos sentimos orgullosos de ellos.
Gracias por escribir sobre su trabajo.

Alicante Cuenta dijo...

Gracias a ti Cecilia por comentar, aunque te lo agradezca con retraso. Un saludo.