27 de noviembre de 2015

Pequeñas historias del comercio en Alicante

FLORISTERÍA SAN BLAS
Ayer tuve que ir al barrio de Carolinas. Hacía tiempo que no paseaba por esa zona de Alicante. Carolinas siempre ha sido el lugar donde me hubiera gustado vivir.

Allí se respira vida, hay buen ambiente y estás a un paso del centro. Cuando era adolescente tenía un grupo de amigos y nos reuníamos allí. Más tarde, la vida ha querido que personas que aprecio vivieran por la zona y siempre me he sentido como en casa, o mejor.

El motivo de escribir es hablar de sus comercios. 

Al llegar a casa pensé en dejar una reseña en Facebook, porque se ha puesto en marcha una campaña para incentivar la compra en la tienda tradicional y la respuesta fue de lo más positiva. Me limité a compartir mi experiencia.



"Soy una defensora de los pequeños comercios. El otro día leí un comentario sobre la escasa amabilidad que se da entre los comerciantes, me quedé petrificada, por supuesto no dije nada.

Os lo cuento ahora. He ido a mi querido barrio de Carolinas. En la primera tienda he hecho una devolución, no sólo han sido encantadores, sino que sin decir nada me han mostrado algo que yo no podía comprar en ese momento (y había gente esperando) sin prisa, con una sonrisa.

Luego me fui a comprar unas zapatillas para estar por casa y la chica estaba embarazadísima. 

Hemos hablado de lo tontas que somos a veces las mujeres pensando en que el color combine hasta con el pijama o lo que llevemos, al llegar la hora de pagar me faltaban unos céntimos, yo quería pagarle con tarjeta pero me ha dicho que en su tienda no se podía...

¿Solución? "Ven a verme un día pero como me traigas el dinero no te dejo entrar" 

Tercer lugar, necesito una pila para mi reloj, la chica ve que se deshace ¡¡Un mal día lo tenemos cualquiera, me costó cuatro perras!! Pues no le ha puesto la pila y podría haberlo hecho. Con callar... 

Me ha indicado dónde había una joyería para poner una correa al reloj bueno que tengo je y al más especial. Me lo regaló un amante de los trenes (como Sheldon)

Hacía años que no veía a esa pareja que regenta la joyería. Además de ser amables, ponerme una correa de calidad a buen precio, nos hemos dado ánimos para ver "si la cosa ya mejora por fin este año y empieza a haber trabajo para todos".

¿Que falta simpatía entre los comerciantes? No, yo diría que tienen para dar y regalar. Y que el apoyo que les demos haciendo nuestras compras es poco. Se lo merecen por luchar contra tanto obstáculo. Es mi opinión que servidora también adquiere alguna cosita por Internet, pero un olé por el comercio alicantino."


Entre las respuestas ante esta reflexión estaba la de una amiga que fue compañera en un curso hace muchos años. Su hermana tiene una floristeríaFLORISTERÍA SAN BLAS y me habló de Naira, una enamorada de las flores, diseñadora y propietaria del comercio. 

Esta tarde tenía pensado pasarme por la tienda. Justo pensaba ir a San Blas (casualidades)

Es probable que otro día visite la tienda. He echado un vistazo a las fotografías y es cierto que tiene buen gusto para jugar con las formas y los colores de las flores y plantas: ramos de novia, decoración. Ahora le hace falta una página para poder mostrar su creatividad.

Y con esta última idea dejo mi reflexión: quizás algunos comercios necesiten más marketing y publicidad para que nadie se quede sin conocer el talento que se esconde detrás de muchos escaparates.

En la finca Jardinade



Vamos a acompañar nuestro paseo por los comercios de Alicante con música





Joana Sánchez 

9 comentarios:

José Diego Quiles Pomares dijo...

Y un olé por tí, tienes razón. Los pequeños comerciantes son, en general, muy agradables. Nada que ver con las grandes superficies que casi nunca encuentras a quién preguntar y, cuando lo haces, te responden con muy poca empatía

Jacinto Roldan Garcia dijo...

Hemos de apoyar a los comerciantes de nuestro barrio de toda la vida y dejarnos de tantas grandes superficies que pertenecen a empresas que no son ni españolas.

María Moreno dijo...

Tienes razón,en los negocios pequeños el trato suele ser mas amable y mas cercano,también depende de nuestro comportamiento ,ellos también agradecen que seamos amables ,tu lo eres y yo también lo intento....

S.Peña dijo...

Una amiga hizo una selección de personal para esa empresa que tiene como eslogan el "inteligente" dicho "¡yo no soy tonto!". Le salió una chica arrogante, más joven que ella, de Recursos Humanos poco más o menos que diciéndoles que si iba a trabajar allí iban a "sufrir" mil cosas. Charla en positivo, cero. Formación de los trabajadores, cero. Uno a veces sabe más que ellos y no les culpo porque están sin formación e intimidados. Les da igual, invierten en publicidad agresiva que incita la compra impulsiva de un sector de la población que no se plantea nada y cree que está haciendo una buena compra. En seis meses ese trabajador está en la calle. Resultado: no compro ahí. Y otra cosa: el dechado de inteligencia que inventó ese eslogan que se lo meta por donde se empiezan a hacer los cestos. ;-/

Paloma Gomis dijo...

Bueno, yo no tengo tan buenas experiencias como tú pero siempre me gustó ir a los comercios de Carolinas... Por algo será...

Alicante Cuenta dijo...

He querido publicar todos los comentarios realizado en Facebook por si pueden ser de interés o motivación para los propietarios de los pequeños comercios en Alicante y en cualquier punto de España.

Enrique T.F. dijo...

Me maravilla leerte, Joana. Esas nostalgias me gustaría vivirlas viendo mis calles ... yo vine a Alicante con 29 años, desde Barcelona, por eso verás que colecciono gran cantidad de fotografías de Barcelona antigua.
Un abrazo y ... bravo, como siempre.

Joana Sánchez dijo...

Hola Enrique, sé que viniste desde Barcelona. Tengo mis momentos de "amor" "odio" hacia Alicante, pero al haberme criado aquí es lógico que le tenga cierta estima a algunas zonas. Y otras, no tengan sentido para mí.

Yo no conozco Barcelona y siempre he querido ir. ¿Ves? :)

Un abrazo fuerte y gracias por estar y por aportar siempre.

Miri dijo...

Como siempre, un gustazo leerte. Sabes apreciar los pequeños gestos y nos los cuentas de tal manera que nos transmites tus reflexiones con mucha facilidad. Esos comercios concretos y el pequeño comercio en general, ese de barrio, el de "toda la vida", te estarán muy agradecidos. Y nosotros que te leemos, también, por recordarnos la importancia de comprar donde más te vas a llevar, aunque no sea algo material.

Nos seguimos leyendo

Miri