19 de agosto de 2023

Ir a la Playa del Cocó sola

 



Hacía años que no iba sola a la playa. Concretamente a la del Cocó. Desde 2015 mi tiempo se convirtió en el de los demás. Y como un milagro, fruto del esfuerzo, me puse un caftán blanco y cogí mi bolsa. Primero la línea seis, después la dos. Nerviosa y feliz como una niña de seis años, así estaba.

Mi blanca palidez pisó la orilla despacio. Dejé que una ola me lamiera los pies y caminé hasta el final. Llegué al espigón donde encontré un hueco al lado de un matrimonio mayor.

Una vez cumplido el ritual de la protección solar para pieles fantasmales, miré embobada el agua. Ir sola tiene sus ventajas. Para mí fue una bendición no tener que hablar porque había demasiados pensamientos y algún malestar que debía llevarse la brisa.

Llevo tantos años sin compañía masculina a mi lado que no sabría ni qué decir. Miento, porque conversar se me da bien excepto por redes sociales. 

Al compás de las olas, hago un repaso sobre mi día a día, mi mes a mes y mi año. Compruebo que algunos son tan similares que sólo deberían contar como uno.

Trámites burocráticos, médicos, trabajos, enfermedades de familiares, hospitales, algún ataque de pánico, escribir, participar en concurso, perder, volver a escribir, reabrir un canal de YouTube.

No soy fuerte. No me gusta que me lo digan, porque eso me convierte en la persona con orejas ideal para que otros me cuenten sus problemas.

Casi me desmayo en dos ocasiones, las dos en las que intenté con mis medios, que dos mujeres abandonaran ideas suicidas. Suspiro... Detrás de mi sonrisa, escondo esas pequeñas tragedias, luego me tiemblan las piernas como gelatina y vuelve a amanecer. No, no soy fuerte.



Llevo mi vida a cuestas con una media sonrisa

Y viene otra ola y me levanto. Me meto en el agua, las algas se me enredan en los dedos de los pies. Me hacen cosquillas. hago fotos con el móvil. ¡Añoro mi cámara! No pienso en nada. Noto la vitamina D inyectándose por cada poro. Los iones negativos formando mi silueta. He cogido peso, estoy sana, pero tengo que perder x kilos, estoy en ello, por eso a la vuelta volveré andando.

Creo que la playa me ha hecho efecto dos días después. En los que he salido y entrado como si los ataques de pánico nunca hubieran existido. Así son ellos, vienen y van como las olas de calor.

He cambiado mucho. Demasiado. Ahora me río menos, pero con más fuerza.

En el bus me he reído por dentro al oír dos hombres discutiendo sobre política. Recuerdo cuando me importaba, incluso cuando me creía que el señor A o la señora B, de veras se preocupaban por lo que al currito de a pie le sucede.

Llevar mi vida a cuestas, supone algo tan importante y tan profundo que no sé cómo antes tenía tiempo de librar batallas que ahora se me antojan esperpénticas. Por ejemplo, el feminismo. ¡Llevaba gorra, el sol no me afectó!

Mientras bebo un trago de agua, pienso en qué hacen por mí niñatas que enseñan las tetas o que gritan por sus podcasts consignas aptas para niños de cuatro años. Otra vez sonrío por dentro, nunca he oído a ninguna hablar sobre las cuidadoras, su desgaste físico y mental. Y son tantas como turistas hay en esta playa.



Me sacudo la arena de las piernas y me siento liviana. Supongo que mis propias batallas no me parecían importantes o quizás, me daban miedo así que perdía mi tiempo en cuestiones como esas. 

Cuando la vida te da una patada y ordena tus ideas, guau... la sensación de vértigo es grande, enorme, porque ya no te aferras a ninguna sigla, ni a ninguna salvadora cubierta de purpurina, no hay causas por las que pelear, si acaso las que te rodean. No me gusta cómo se está quedando este país, es como el espigón que divide la playa en dos.

Me tengo que ir, me falta casi una hora para llegar a casa, una casa que sigue en el mismo barrio en el que muchos no quieren entrar. He ido al fin del mundo por muchas personas. No soy miedosa ni tampoco creo en leyendas. Sí en fantasmas, sobre todo en esos que pulularon por mi vida y ahora, escondidos, se asoman por la red a ver si saben algo de mí. Qué daño han hecho las redes sociales.

Me voy feliz. Me lavo los pies con el agua que me ha sobrado. Me planto mis gafas nuevas y a seguir con la lucha mientras sigo creyendo que tengo veinte años, pero mejor llevados. Ahora sí llegó el momento, le cuento a un amigo que he ido a la playa sola y él lo celebra como si hubiera marcado un gol.


Joana

22 de junio de 2022

Felicidades, Paco Huesca


 XVI Festival de Cine de Sant d'Alacant. 2016. Ficus de Plata Honorífico para Paco Huesca



Muchas costumbres se han perdido desde que comenzó Alicante Cuenta, pero hoy 22 de junio no podíamos dejar pasar por alto una fecha tan señalada. Hoy cumple años, Paco Huesca. Parece que fue ayer cuando me atreví a proponerte que colaboraras en este humilde blog.

En los últimos años apenas nos hemos visto pero he sabido de ti porque a las personas especiales y guerreras como tú hay que cuidarlas aunque sea a través de un mensaje.

Antes de partir a tierras del norte, estabas muy activo y algo triste pero siempre remontabas. Siento no haber estado presente en todo lo que organizabas, pero la vida es caprichosa y me tenía entretenida en otros menesteres.

Pero lo más importante es que sé que estás bien, en la mejor compañía, la de Ana Teresa y rodeado de personas que te quieren y aprecian.

Por aquí también nos acordamos de ti y echamos de menos tus crónicas, aventuras y proyectos relacionados con el cine.

Te deseo un feliz cumpleaños y te mando un abrazo gigante.


Y para terminar, nada mejor que recomendar tu libro con Marc Llorente: 











11 de junio de 2022

No eras John Wayne, y sí Gary Cooper en El orgullo de los Yankis

 



Durante seis años creí que eras John Wayne porque tu porte me lo recordaba. Un tipo duro y que podía con todo, prácticamente perfecto. Tu seriedad fue confundida con fortaleza. Eras varios personajes en uno. En ocasiones un Mr, Darcy por tu forma de hablar, de actuar. Otras, un Forrest Gump inocente y puro al que abrazar durante horas. 

En realidad, eras Gary Cooper en El orgullo de los Yankis, un hombre bueno, inocente y que perseguía un sueño, la calma.

Qué difícil es conocer a alguien cuando lleva dentro de sus bolsillos a tantos personajes. A veces, no nos conocemos y creemos que es mejor interpretar a alguien que encaje, que guste y agrade al otro. 

La realidad y el tiempo nos dice que es mucho mejor mostrarse tal y como somos, porque nadie quiere enamorarse de un ideal, sino de un ser imperfecto que sea capaz de desnudarse emocionalmente y afirmar: Este soy yo, sin adornos: un tipo con algunos defectos y miedos.


Para mí, aunque tuvieras múltiple personalidad, siempre serás sagrado. :)




Joana

25 de enero de 2022

¿Por qué es tan importante ser normal? As We See It


El título de este artículo hace referencia a una frase que pronuncia uno de los personajes de As Wee See It. Se acaba de estrenar en Amazon Prime Video y narra la vida de tres compañeros de piso con espectro autista.

Hace un tiempo escribí sobre una asociación de personas con Asperger. También compartí varios vídeos de un chico que nos explicaba en primera persona en qué consistía.

Yo no soy normal. Quiero empezar hablando claro. Tenía problemas para salir a la calle cuando era una adolescente y luego una joven. Lo bautizaron como agorafobia. 

Cuando la ansiedad llega a un pico elevado y la sensación de angustia es grande, no quieres volver a pisar el lugar donde tuviste un ataque de pánico (en este caso la calle).

Si hay un aspecto que me ha molestado a lo largo de los años es que este hecho fuera tomado por terceros como algo por lo que compadecerme. Nunca lo entendí. 

Sobre todo si he sido capaz de hacer una vida "normal" y podía montar en avión, en tren y vivir en otras ciudades. Y lo más importante de todo: soy feliz. Sé lo que es el amor, sé lo que implica afrontar grandes responsabilidades y saboreo cualquier pequeño detalle que me ofrezca esta vida.

Pero cualquier problema/enfermedad/trastorno o como queramos bautizarlo cuando es crónico, puede asomar la cabeza y hacerte creer que revives el pasado. En mi caso he tenido suerte, no he sufrido acoso ni burlas. 


As We See It (Nuestra mirada) o cómo hablar del autismo desde la realidad


He querido contar este tema personal antes de hablar de la serie porque parece que la ficción en este formato está produciendo por encima de sus posibilidades y no todas son grandes trabajos.

Pero As Wee See It parte de una base perfecta, su director tiene un hijo autista y ya ha tratado este tema en otros trabajos. Por lo que sé, todos los miembros del equipo eran personas con diversidad funcional. Si a todo esto le añadimos unos guiones que te llevan de la risa al llanto en menos que canta un gallo, sólo queda decir que es una serie redonda.

La he terminado hoy y uno de los personajes, Jack (Rick Glassman) asperger, no sólo me ha hecho guiñarle un ojo a la pantalla en alguna ocasión, también me ha llevado a mi pasado. Concretamente de 2008 a 2014 y a una persona.

No sé si él era o no asperger. No sé si alguien se lo diagnosticó. Sólo sé que nos gusta que la gente sea sincera pero cuando él lo era a veces resultaba hiriente. En la ficción lo vemos en varias ocasiones cuando daña a sus compañeros porque Jack no tiene filtros.

Lo mejor de la serie es el sentido de humor que rodea a situaciones complicadas. Como la de su compañero Harrison que no puede llegar hasta la cafetería de la esquina.


No ha sido gracias a este magnífico trabajo por lo que he pensado en él. Lo recuerdo en muchas ocasiones. De hecho, sus verdades como puños eran acertadas la mayoría de las veces. Pero cuando dos personas no se encuentran bien es imposible lidiar con temas tan delicados. 


Los familiares de los personajes hacen lo que pueden porque no son perfectos. Pierden los papeles, cometen errores y dañan por querer proteger. Estallan porque aunque sean dichas sin maldad, las verdades no son siempre ciertas. 

Ese padre, ese hermano, esa familia, esa cuidadora..., fallan pero una y otra vez son aceptados por los tres personajes protagonistas. ¿La razón?. Supongo que el amor verdadero puede con todo.  Y como dice en el título ¿Por qué es tan importante ser normal?

Quien sea normal, que levante la mano.

Os dejo un vídeo de mi periquito Rocky. Nunca creí que tendría una mascota tan inteligente y a la que grabaría. Aunque tampoco pensé que viviría una pandemia. Rocky fue adoptado en mayo de 2021 y a los pocos meses ya hablaba. Le gusta estar sobre mi hombro, sobre mi portátil, sobre mi móvil y se alegra cuando me ve. Su cerebro es un misterio para mí pero no el hecho de que me quiere.


Lo dejo ahí, como una reflexión.


Joana Sánchez

7 de diciembre de 2021

¿Algún romántico en la sala?

 


¿Algún romántico en la sala?

Ayer me llegó un correo con las estadísticas de Alicante cuenta. Me llamó la atención que todavía reciba visitas porque no está actualizado. Al menos no como debería. Por esta razón hoy me he dicho: ¿Por que no hablas de ¿Algún romántico en la sala?.

Por 2019 escribí esta historia donde la protagonista es una admiradora del cine de Katherine Hepburn, lee a Jane Austen y le gustan Los Flechazos. Para colmo se lleva bien con sus dos ex. Un perfil poco apropiado para una escritora de novelas románticas.

Ellos son tipos normales un tanto frikis y ella también tiene su punto peculiar. ¿Cómo va a hablar del amor si no le gusta lo que ve en el siglo XXI?

Y lo más grave, no forma parte de esa legión que se enamora de estereotipos y luego cree que en la vida real, existen amores donde se puede ser caprichosa o esperar que caiga purpurina del cielo todos los días.

¿Podrá una persona que no vive en un universo rosa escribir una novela romántica?

Este género me parecía difícil y tampoco tuve claro si podía encajar en él. Pero Algún romántico en la sala, contiene una historia coral, amistad, humor, música y una crítica a las redes sociales con mucho cariño.

En el momento de dar vida a Paula, no había ninguna pandemia, pero creo que explica bien cómo se sienten algunas personas respecto a la mayoría: bichos raros sin importar el contexto. Raros por el simple hecho de no gustarte lo que a todo el mundo.

Y si ha habido un momento para sentirte un bicho raro porque no tienes pareja es este. Con un virus desde 2020 que impide que tengas una cita normal, como si por el hecho de no tener novio/a antes de la pandemia tuvieras una maldición: soltero/a para siempre. ¿O es una bendición?


La autora anónima que aspira a ser la más vendida estas navidades


Soy alicantina/murciana. Es mi primera novela romántica y sólo espero que te guste al igual que a la creadora de la portada, a la que jamás se le había pasado por la cabeza ver una comedia romántica.

Como me gusta reírme de mí, un día me vino a la cabeza el cantante que aparece en la maravillosa LoveActually y su propuesta para ser la canción de las navidades y no caer en los tópicos.

Así que mi propuesta es esta: ¿No sería genial que los escritores que tienen editoriales y campañas de marketing brutales detrás, se vieran desbancados por una novela romántica y pequeña escrita por una autora desconocida?

Si has dicho sí, eres una gran persona. Y si lo compras, aún más.



Hazte con él AQUÍ, por el amor y por el humor.


Un abrazo e intentemos ser románticos racionales.



25 de octubre de 2021

Microrrelatos con poderes y arte

 


¡Hola! La bajada de precio de Microrrelatos con poderes, se debe a que la impresión no es a color. Por un lado, hemos sacrificado el trabajo con las tonalidades que hizo Elisabet, pero por otro es mucho más accesible para vuestros bolsillos.


Era consciente de que se trataba de un precio un tanto elevado. Por eso, mi sorpresa fue máxima cuando a los pocos días me han empezado a llegar imágenes con ejemplares ya en vuestras casas.


Mil gracias por confiar en un puñado de historias breves escritas con el corazón.


¡Nos leemos pronto!


3 de octubre de 2021

Salón del Manga y Cultura Japonesa de Alicante - 9 y 10 octubre 2021

 


El Salón del Manga y Cultura Japonesa de Alicante es un evento desarrollado en la Institución Ferial Alicantina que se inició en el año 2011. 

Desde entonces, siempre nos hemos esforzado por ofrecer a nuestros asistentes un trocito de Japón, dando especial importancia a su cultura tradicional pero sin olvidarnos del manga y el anime.

La riqueza de la cultura japonesa es el canal perfecto para conseguir una forma de entretenimiento didáctica y divertida. No es otro nuestro objetivo que difundir y enseñar la cultura japonesa a través de las más de 200 actividades que se desarrollan durante el evento.

En el Salón del Manga y Cultura Japonesa de Alicante nos sentimos orgullosos de trabajar bajo una filosofía de mejora continua, algo que no podríamos hacer sin todos vosotros. ¡Gracias y bienvenidos un año más!




Mitsuru Nagata



Esta es la presentación que encontramos en la web. Conozco este evento gracias a mi amistad con Mabel Iborra, una de las organizadoras. Lo mejor para escribir sobre un tema es abordarlo desde el conocimiento o la experiencia propia.


En 2015, cuando nadie pensaba o imaginaba que íbamos a vivir una pandemia, tuve el honor de ser una de las voluntarias. Claro que me gustaba la cultura japonesa, pero no hasta el punto de las personas que vi allí.


Una invitada a un evento mágico que me llevó a Japón unos días


Fue una experiencia inolvidable. No sólo por lo que significó 'aparcar' un mal de amores y centrarme en mi persona, sino por abrir los ojos a un mundo que hasta ese momento desconocía. Vi chicos jóvenes, madres acompañando a sus hijos, parejas con bebés, aquello fue una fiesta.


Pero si hay algo que puedo y debo destacar es la excelente y exquisita organización por parte del equipo y de todos los voluntarios. Les doy la enhorabuena desde aquí porque han tenido que preparar en un mes y poco, lo que llevaría prácticamente medio año. 


Es un orgullo que Alicante sea reconocida por un encuentro tan valorado por personalidades de Japón y sobre todo, por todos sus visitantes.




Juana Sánchez González